En polo acuático, Cuba arrasó. |
Varios han sido los cambios en el relevo generacional del deporte cubano en 34 años. En el Istmo, ocurrió el despegue hacia los éxitos, generado por el estímulo a la masividad, respaldo estatal a la práctica del deporte y asesoramiento del antiguo Campo Socialista. Después de esa cita, en los Panamericanos de Cali-1971 fuimos segundos del continente, dejando relegadas a 30 naciones, y en la Olimpiada de Munich-1972 obtuvimos tres oros en boxeo y un tercer lugar en básquet masculino, además de otros podios en atletismo y la propia disciplina de los puños.
La bienvenida, luego de una gran actuación en predios panameños. |
Nos proponíamos 10 millones de toneladas de azúcar y también hicimos “zafra” donde unieron océanos, pues, por tercera ocasión histórica (las anteriores en 1930 y 1946) y primera después de 1959, la delegación cubana dominaba el medallero, ahora gracias a 98 cetros, 61 platas y 51 bronces – más del 33 por ciento de todos los metales disputados. “En Panamá: a golpe de mocha”, ese lema inspiró a los exponentes criollos en los XI JCC, entre el 28 de febrero y el 14 de marzo, mientras, cruzando el mar caribeño, la faena hacía temblar el cañaveral.
Aunque Holguín en esa década aún era parte de la provincia oriental, nueve representantes del actual territorio lograron ser medallistas y 11 participaron en la lid canalera. Solo Puerto Rico le anotó un gol al guardameta “de hierro” Oscar Periche, en polo acuático, y sus compañeros – incluido su coterráneo José Ángel García – causaron 139 agujeros en los arcos rivales, calificando al equipo nacional de “escapado” y saliendo airosos en ocho partidos de manera inobjetable.
La delegación cubana desfila en Panamá-70. / Foto: Archivo |
Margarita Skeet y Caridad González, capitana del quinteto, fueron de las chicas de puntería en el combinado de baloncesto, el cual destronó a las mexicanas, casi imbatibles desde 1935; en el pleito de desempate en el gimnasio Nuevo Panamá ante las aztecas, favorable a las nuestras, 55-49, Skeet encestó 14 tantos y González cinco. Los números del jardinero central Fermín Laffita le reportaron 375 de average ofensivo, dos jonrones y 11 impulsadas (puntero de su elenco en ese departamento) en ocho desafíos, en los cuales estafó cinco bases, todo sin errores a la defensa. El terreno Juan D. Arosemena tuvo a Laffita de cuarto o quinto turno al bate y su plantel terminó ganando, como se esperaba del titular mundial, cuya victoria de 1969 contra EE.UU. paralizó la noche dominicana.
Juan García, de campo y pista, y el tirador Sergio Álvarez se convirtieron en bicampeones. García le dio la vuelta al óvalo sobre vallas en 50,6 segundos – plusmarca nacional y de los JJC – y corrió en la posta recordista de los Juegos a similar distancia, y Álvarez integró los colectivos vencedores en carabina tres posiciones y fusil libre, además de acumular dos premios plateados individuales. Carlos Pavón sacó de la alberca panameña tres preseas en natación, una plata y dos bronces, en 100 metros espalda y en los relevos cuatro por 100 libre y combinado, respectivamente, y el decatlonista Ramón Díaz acabó segundo, merced a 6 mil 934 unidades. La pentatlonista Deisy Hechavarría y el nadador José Rafael Díaz completaron la incursión holguinera en una justa de 2 mil 500 competidores, cifra máxima para la época.
En estos certámenes, se tenía menos en cuenta de forma oficial el escalafón de medallas (hoy todos los medios de difusión y los comités olímpicos lo llevan al dedillo); pero ahí está lo hecho por la representación de Cuba, a poco más de una década revolucionaria.
Veracruz ha encontrado una delegación cubana joven, poco fogueada, mas corriéndole aptitud y actitud por las venas. “Chamacas y chamacos” se prepararon al detalle para darle sustos. Mas la asustada asustará. / Por Nelson Alejandro Rodríguez Roque
Fechas de los Juegos Centroamericanos y del Caribe
Tabla tomada de Granma. |
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