Club Atlético de Holguín / Fotos Archivo |
Cuba se dolía de una Enmienda Platt. Mas se recuperaba de tres contiendas independentistas. Los machetes con que corrimos a España esperaban otro llamado. A Holguín, pueblo oriental, hacía poco tiempo (28 de febrero) un gran temblor (6,2 grados Richter) le había causado pánico.
Pero aunque la tierra sintiera calambres, cada vez más el antiguo hato se consolidaba urbanísticamente, debido al auge de actividades económicas y sociales, matizadas en el deporte por el incremento de competencias y número de adeptos al tenis, carreras de autos, baloncesto, boxeo y otras disciplinas, que demandaban espacios. Por eso no esperó más y fundó su Club Atlético, recinto deportivo inaugurado el 21 de mayo de 1914.
El papel recreativo de la ejercitación física y el desarrollo de la educación corporal, resumidos en la máxima de “levantar el espíritu deportivo en esta ciudad” , se enunciaba en el articulado de la nueva instalación (intersección de las calles Aricochea y Narciso López), con una extensión de mil 72 metros con 76 centímetros. La misma se constituyó en una sociedad integrada por 42 socios fundadores, bajo la presidencia Luis Ezpeleta Pérez, y fue inscripta el 28 de mayo de 1915, de acuerdo a un certificado y decreto del Gobierno en Santiago de Cuba, firmados por el gobernador Manuel Rodríguez Fuente.
Fue la primera de su tipo y única en aquella época en la antigua provincia de Oriente e interior del país. La revista El Fígaro, en un artículo de 1918, apuntó: “El local en que en un principio se instaló resultaba demasiado pequeño… se adquirió entonces, con el esfuerzo de todos, el magnífico terreno en que hoy se encuentra. Se construyó la Casa Club… duchas, taquillas y un pequeño gimnasio. Más tarde se dotó (…) de un court de tenis, de cemento, así como una amplia cancha de handball (frontón) y un terreno de baloncesto”.
La Junta Directiva primigenia se reunía periódicamente para decidir asuntos tales como planificación de confrontaciones caseras o contra otras sociedades y clubes, definición de formas de pago para presenciar eventos e incluso aprobar una propuesta de iluminación con luz eléctrica, entre muchos asuntos, ya que así consta en los Libros de Actas conservados en el Museo Provincial del Deporte. En su extenso andar, ese sitio ha tenido sobre canchas y salones el aprendizaje, entrenamiento y lidia de atletismo, baloncesto, bádminton, boxeo, esgrima, futsal, gimnasias, kárate, modalidades de lucha, handball , balonmano, taekwondo, tenis de campo, tiro, voleibol de sala y de arena.
Diversas otras manifestaciones han tenido escenarios en este recinto, donde funcionó una escuela del primer ballet de Holguín (1948), se organizaban bailes, verbenas, matinés dominicales, rifas y regalos, paralelos a las competencias. El tenis fue la primera disciplina con acción en el Club Atlético, sin embargo, no tardó mucho tiempo para que otros deportes impusieran su protagonismo.
Equipo de baloncesto subcampeón de Cuba |
Fue la primera plaza en Holguín donde se efectuó un cartel de boxeo profesional. Ocurrió el 4 de febrero de 1917, cuando el estelar púgil local Oscar Albanés peleó versus Carlos “El Grande”, de Argentina (división light heavy weight). El holguinero se impuso en cinco rounds por nocao y recibió como premio La Copa de Plata. La recaudación se dividió en dos partes iguales, para los fondos en beneficio de la instalación y para el peleador visitante.
Sobresalientes boxeadores profesionales del país y de este territorio pugnaron, ante grades concurrencias, en el Club Atlético, como el santiaguero Ciro Moracén y el holguinero Joe Calixto. Más de una visita hizo al lugar “Kid Chocolate”, para conversar con amigos y promotores locales, según José Buitriago, gran conocedor del pugilismo en Holguín.
Una velada internacional de lucha pancracio allí (década del cincuenta) causó gran expectación, pues se trataba de una modalidad desconocida en ese tiempo. Manuel Pavón Sánchez, quien presenció el espectáculo, comentó que los gladiadores, con sus sobrenombres, no defraudaron: “La Amenaza Roja” y “El Negro Badú” – el más cotizado en su época –, ambos de La Habana; “El Gran Tojo” (japonés) y “El Rey de la Pata Voladora” (venezolano).
Un gimnasio biosaludable añade modernidad. / Foto: Elder Leyva |
Tiro, tenis, bádminton y voleibol sobresalieron en su accionar en los años siguientes, con entrenamientos y justas del municipio, antigua región y de la nueva provincia. En la cancha de tenis, surgió, creció y se convirtió en un estelar tenista, luego entrenador, Gérmines Bravo, “Pelencho”, quien falleció mientras cumplía colaboración en Colombia.
La actualidad en el campo de tiro / Foto: Reynaldo Cruz |
Quizá sea el mini-fútbol el deporte más practicado ahora. / Foto: Elder Leyva |
La dirección del Combinado celebrará el centenario de su Club Atlético el venidero miércoles, con festivales recreativos y en varias disciplinas, para cerrar una historia centenaria y comenzar otra en la instalación deportiva en activo más antigua de la provincia. / Por Nelson Alejandro Rodríguez Roque y Calixto González
No hay comentarios:
Publicar un comentario